El mundo ya no es digno de la palabra
nos la ahogaron adentro
como te asfixiaron
como te desgarraron a ti los pulmones
y el dolor no se me aparta
sólo queda un mundo
por el silencio de los justos
Sólo por tu silencio y por mi silencio, Juanelo.
Último poema de Javier Sicilia, escrito después de la muerte de su hijo, Juan Francisco.