martes, marzo 08, 2011

Diferencias

Tú: Los Supersónicos
yo: Los Picapiedra
tú: La Cartuja de Parma
yo: Rojo y negro
tú: las Chivas
yo: las Águilas
tú: los wafles
yo: los huevos con longaniza
tú: legislas
yo: soy legislado
¿a dónde vamos a llegar
mi cielo
con tantas diferencias?
¿será por eso
que tanto
tanto
nos peleamos?
sólo unos favores te pido
cariño
para arreglar las cosas
que no vuelvas a decirme inútil
enfrente de mis amigos
que dejes de legislar
cuando estás en la casa
que le pongas la tapa al champú
al salir de la regadera
que ya no uses esos feos zapatos
y que no eructes
por favor
cuando me besas en la boca.



Leías

El otro día
mi cielo
vi que leías
una historia
de la Revolución Mexicana
¡qué contento
me puse al recordar
mis años de ecuela!
me vinieron a la memoria
Madero y Pino Suárez
Zapata y Villa
la Alhóndiga y el Pípila
y nuestra Corregidora
luego me puse a recordar
lo que aprendí
en mis años mozos
de diptongos y triptongos
del origen de la vida
de las capitales europeas
y el himno a la bandera
la tabla del siete
la importancia de los telégrafos
y el inglés
my book and my pencil
are on the table
y más tarde evoqué
mi querida estudiosa
a la maestra Hermelinda
que me enseñó a obedecer
y al maestro Bartolomé
que también lo hizo
con su cinturón
y a Jorgito
mi compañero de banca
que siempre estaba enseñando su pito
o a Panchita
que me escupió en la cara
al terminar el recreo
y en especial
a José Ángel Mendieta
alias El Mantecas
o El Gorilón
que me dio un puñetazo
por el cual terminé en el hospital
con la nariz rota
y a mi padre
que me regañó por no haberme defendido
a mi madre
que me dejó solo en el hospital
porque ése era su día
de jugar canasta con sus amigas
ay, amor
¿por qué te pusiste a leer
una historia
de la Revolución Mexicana?


Francisco Hinojosa, Poesía eres tú