martes, febrero 14, 2012

Como si abajo estuviera el mar

‎"Él recordó al bueno de Vila y a la abuela de Viña de Mar, echó una última mirada al escritorio, revolvió los papeles con los dedos de una mano mientras apagaba el pucho en el cenicero y luego, despacio y sin vacilaciones, saltó al vacío por la ventana del patio interior. Como si de la puerta trasera se tratara, pensó, simplemente como si abajo estuviera el mar". 

Tomado de "Diario de Bar" de Roberto Bolaño & A.G. Porta.