viernes, febrero 22, 2008

Desde el desencanto.

La memoria es una puta. Individual o colectiva. Puta bien aprovechada por los oportunistas. Puta ella que se va con el que le acomoda, para a veces nunca volver. Puta del tiempo y del espacio, a veces costosa y otras no tanto. Ahi anda, paseandose, enseñando las piernas y el escote, siempre se vende con sus mejores vestidos.

Procura no enamorarte de ella.

Saludos.